¿Cómo sé si tengo un implante dental fallido?
La mayoría de los implantes dentales constan de tres partes: el cuerpo del implante hecho de titanio que se inserta en el hueso, un accesorio que comúnmente se conoce como pilar y una corona dental adherida al pilar para alinearlo con los dientes naturales restantes. Si una de estas partes se rompe o se afloja, puede ocasionar problemas, incluido un implante dental fallido.
Aunque los implantes dentales están hechos de metal, un proceso biológico llamado osteointegración les permite funcionar. Durante la osteointegración, el cuerpo produce células óseas vivas que comienzan a crecer alrededor de la superficie del implante, anclándose a la mandíbula. A medida que pasa el tiempo, el hueso sano rodea el implante. Y, si la osteointegración no se produce como debería, puede dar lugar a problemas posteriores a la implantación.
Cuando el hueso no crece como debería alrededor de un implante dental, puede experimentar movilidad. La movilidad puede ser sutil para empezar, y es posible que ni siquiera la reconozcas, pero tu dentista seguramente lo hará durante tu próxima revisión. Dicho esto, si sientes que tu implante se tambaleó, es esencial que veas a tu dentista lo antes posible.
También puedes experimentar dolor, hinchazón o infección, aunque no siempre es así. Si el dentista nota que tu implante se mueve, recomendará una radiografía para determinar si hay una pérdida significativa de hueso alrededor de la parte metálica del implante dental.
Específicamente, los signos de un implante dental fallido incluyen:
- Aumento de la hinchazón
- Inflamación de las encías
- Recesión de las encías
- Dolor intenso o malestar
- Dificultad para masticar
- Aflojamiento de un implante
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¿Qué causa un implante dental fallido?
El éxito de un implante dental depende de muchos factores, incluidos tus hábitos y tu salud en general. Ciertas condiciones médicas pueden aumentar el riesgo de que un implante se mueva. Tanto la enfermedad de las encías (enfermedad periodontal) como el bruxismo (rechinar los dientes) pueden dañar un implante. La osteoporosis ataca la fortaleza del hueso y la densidad del diente, dificultando el anclaje del tornillo del implante. Los tratamientos contra el cáncer pueden inhibir la capacidad de curación de los huesos y, por lo tanto, muchos dentistas sugerirán que el tratamiento con implantes se detenga durante la radioterapia.
Los medicamentos recetados también pueden aumentar el riesgo de que falle un implante dental. Por ejemplo, un compuesto que se encuentra comúnmente en los antidepresivos afecta la tasa del metabolismo óseo que puede provocar problemas de osteointegración para quienes toman esos medicamentos. Fumar también puede aumentar las posibilidades de que falle un implante dental, dependiendo de dónde se colocará el implante en la boca.
Como resumen, las razones más comunes por las que falla un implante dental incluyen:
- Infecciones bacterianas
- Enfermedad periodontal avanzada o no tratada
- Mala higiene dental
- Bruxismo (rechinar los dientes)
- Tratamiento del cáncer y radioterapia
- Osteoporosis
- Algunos medicamentos recetados, incluidos los antidepresivos
- Fumar
Información médica incompleta
¿Como arreglarlo?
Si tienes un implante dental que está fallando, debes acudir rápidamente al dentista. El investigará por qué ha ocurrió la falla. Verá el implante en sí, así como la restauración, el pilar, los dispositivos de rosca y el material del pilar.
Afortunadamente, los implantes dentales fallidos se pueden tratar rápidamente. Pero tu dentista priorizará la protección de tu salud bucal por encima de cualquier otra cosa. Esto significa que el implante dental fallido se eliminará por completo antes de determinar el mejor curso de acción.
Disminuir las posibilidades de un implante dental falle
Algunas fallas del implantes dentales no se pueden prevenir, pero puede tomar medidas para reducir el riesgo de fallo:
- Cepillarte los dientes dos veces al día, usar hilo dental una vez al día y enjuagare con un enjuague bucal fluorado.
- Visitar al dentista cada seis meses.
- Dejar de fumar.
- Aumenta el consumo de calcio.
- Come alimentos ricos en calcio como leche, yogur, brócoli, naranjas y queso.
- Consulta sobre un protector bucal para tratar el rechinamiento de los dientes.
- Evita comer hielo y dulces.
En Dental Torre Pacheco, dentistas de confianza en Torre Pacheco somos especialistas en tratamientos para mejorar la salud dental de los pacientes. Para más información no dude en acudir a nuestra clínica.
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